En la actualidad, podemos dividir la funcionalidad básica de un sistema de gestión de edificios (BMS) clásico en tres funciones esenciales: control, supervisión y configuración.
Los algoritmos de control analizan las entradas de los sensores y los datos de ocupación para determinar cuándo modular o encender y apagar válvulas, ventiladores y amortiguadores. El monitoreo permite ver entradas, salidas y alarmas de diagnóstico en tiempo real o mediante registros históricos para verificar que el sistema esté controlando como se desea. La configuración es el proceso de cambiar la configuración y modificar cómo se aplican los algoritmos y a qué puntos de datos. Hay una cuarta función, análisis y optimización, proporcionada por un sistema secundario con acceso a todos los mismos datos que el BMS. Su propósito es analizar patrones y tendencias en los datos para proporcionar indicadores significativos del desempeño del edificio y brindar oportunidades de mejora.
El monitoreo de los sistemas BMS comerciales ofrece una funcionalidad de puerto de enlace IP que proporciona un monitoreo completo del sistema desde el interior del edificio. Los dispositivos de IoT aumentan la velocidad, la confiabilidad y la accesibilidad con acceso remoto. Otro beneficio de IoT es que los datos pueden integrarse con datos ambientales y analizarse mediante algoritmos e inteligencia artificial, además de proporcionar análisis y optimización.
La configuración se puede mejorar con IoT, especialmente en dispositivos inteligentes como ventiladores, bombas, válvulas y actuadores. Estos dispositivos se pueden configurar y poner en marcha con herramientas basadas en aplicaciones asistidas por la nube de los fabricantes de dispositivos. Muchos de los sistemas BMS actuales tienen gemelos digitales que viven en un servidor en la nube. El gemelo digital es una réplica completa de los datos que existen en el sistema BMS. Estos datos permiten la configuración, programación y prueba completas de un nuevo sistema BMS antes de que se instale el hardware de control, lo que permite a los integradores de sistemas “encender” el sistema de control más rápido al final de un proyecto de construcción.
Internet de las Cosas (IoT) en la industria HVAC
El Internet de las cosas abre una nueva era de posibilidades, lo que facilita la colaboración con socios y ofrece nuevos productos. También presenta varias preocupaciones operativas y barreras para la adopción, desde la seguridad y la privacidad hasta el intercambio de datos y el almacenamiento de datos. La recopilación de datos no tiene ningún valor si los datos no se procesan o no son relevantes para el usuario final. Los fabricantes proporcionan algoritmos de análisis para equipos HVAC para ayudar a facilitar la operación y mantenimiento, ahorrándoles tiempo y costos laborales al optimizar el rendimiento del sistema. Muchos dispositivos ofrecen informes de rendimiento del sistema con detección de fallas identificadas junto con las acciones para resolver el problema de manera rápida y efectiva. Los dispositivos de IoT tienen lógica incorporada tanto para el análisis de fallas como para la optimización del sistema. Detectan automáticamente la falla desde el principio, lo que permite minimizar el tiempo de inactividad por mantenimiento. Hacer que el sistema HVAC-R sea dinámico asegura que el sistema siempre funcione con la mayor eficiencia y que proporcione un menor consumo de energía.
Monitoreo en tiempo real de la Calidad del Aire Interior.
Con el monitoreo, operación y recolección de datos en tiempo real, los técnicos y operadores pueden hacer un diagnóstico más asertivo. Se necesita menos tiempo para realizar el mantenimiento y se logra un monitoreo en tiempo real. El monitoreo desde cualquier lugar con alarmas en tiempo real se logra con dispositivos IoT. Con una conexión a Internet, puede monitorear y recopilar datos. Los datos en tiempo real permiten la identificación rápida de problemas y las acciones correctivas se pueden realizar en cualquier lugar y sin la necesidad de estar en el edificio. Este tipo de monitoreo de HVAC es valioso en hospitales y laboratorios donde el riesgo de contaminación puede ser alto y minimizar la exposición.
El Internet de las cosas está transformando nuestro mundo, conectando múltiples dispositivos para hacer nuestras vidas más fáciles, seguras y cómodas. IoT es el futuro de HVAC, desde la conectividad en la nube hasta la puesta en marcha rápida y sencilla y la supervisión remota. La gama completa de productos de IoT de Belimo; Energy Valve y los actuadores de válvulas y compuertas conectados a Ethernet aprovechan la tecnología de datos y nube, lo que permite una mayor eficiencia y aplicaciones avanzadas.
Belimo integra el uso del Internet de las Cosas en su dispositivo Energy Valve, el cual consta de una válvula de control caracterizado, un medidor de flujo ultrasónico, dos sensores de temperatura y software integrado y es una válvula de control electrónica de presión independiente con servicios basados en software y conectividad en la nube que mide el flujo y la temperatura para monitorear el rendimiento del serpentín y el consumo de energía manteniendo el óptimo delta T. Los informes automáticos muestran datos de desempeño reales e históricos, recomendando el mayor potencial para el ahorro de energía, el mantenimiento predictivo y la resolución de problemas. Proporciona a un Sistema de Administración de Edificios la información que este necesita para controlar las plantas centrales de la manera más energéticamente eficiente posible. Para conocer mas de la Energy Valve de Belimo te invitamos a leer nuestro artículo Energy Valve: La válvula más eficiente de la industria HVAC”
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